
Hablar de Soho House Barcelona es, sin duda, uno de los misterios del glam de la ciudad condal. Se sabe el lugar, pero se mantiene en secreto a los socios que pertenecen a este selecto club-hotel situado en la plaza Duque de Medinacelli, en un edificio del s. XIX. En este singular edificio se alberga un hotel con 56 habitaciones, con gimnasio, restaurante y un sinfín de sorpresas desconocidas, solo para los socios. Aunque cabe destacar la maravillosa azotea con piscina, con vistas al Port Vell. Quizás uno de sus éxitos sea el de mantener al máximo muchos secretos. Pero esta filosofía hotelera-club, se repite en muchas de las houses repartidas por todo el mundo. Aunque ya os informo que, sin ser socios, podéis alojaros en el hotel. Pero hay una condición, no se pueden hacer fotos para no desvelar en una de tus maravillosas selfies y con labios mirando para Cuenca, alguno de sus socios, que seguramente salga en la foto, admirando tu arte. Avanzo que llevar leggins o otras prendas adquiridas en tiendas de dudosa reputación, esta mal visto. Dejando la crítica nada constructiva. Cabe decir que la finalidad de este club social, es reunir a personas creativas, empresarios y celebridades, en espacios que puedan compartir ideas y proyectos. Ese fue uno de los objetivos cuando se fundó la primera House en Inglaterra. Ahora mismo, lo sé, estáis mirando en Google para haceros socios. Dejar el dedo tranquilo y seguir leyendo. No es fácil que acepten todos los perfiles. Sólo las personas con cierto poder adquisitivo, que trabajen en sectores mayormente creativos, puedan tener mayor posibilidad de formar parte. Y un plus, si conseguís el aval de algún socio en activo.