Veintiuno regresa y lo hace con mucho ritmo en ‘La Toscana’, un tema producido por Tato Latorre, y con el que la banda de Toledo nos vuelve a sorprender (ya son maestros en ello) con un derroche de energía, diversión y ritmo, en la que es la sexta carta de presentación del que será su nuevo álbum de estudio y que podéis reservar en este enlace.
Este nuevo sencillo, el sexto que nos enseñan de su próximo disco, nos lleva a descubrir la faceta más divertida y canalla de Veintiuno, y llega para continuar en la línea de su anterior tema, ‘Mañana lo Dejo’, una canción divertida, pero con una letra que araña y que va dedicada a no poder más, a las promesas rotas y al momento en que decides dejarlo todo.
“No quiero que sea perfecto
Quiero algo que recordar”.
En el vídeo, la banda juega a un peculiar escape room, donde rodeados de pistas buscan llegar a un destino final, que es nada más y nada menos que el escenario y es que ese es el hábitat natural de esta banda que disfruta cada vez que pisa uno y que además siempre que lo hace deja huella y hacen disfrutar a toda la gente que los acompaña en cada ciudad, festival o sala en la que dan rienda suelta a sus canciones.
Su próximo disco, ‘El Arte de Perder’, promete ser el mejor que han hecho nunca y estoy plenamente segura de que lo van a conseguir, porque llevan un año planeando cómo enseñarnos su personalidad, sus ganas, su ilusión y su talento en forma de canciones. Porque las han querido juntar para enseñarnos que, aunque el camino sea duro, aunque se pierda, también así podemos ganar. Porque cada vez que escuchamos uno de sus temas sentimos ‘Escalofríos’ en el alma y porque “la ruina a medias es menos ruina” y con ellos arruinarse también es ganar.
Gracias Veintiuno por ser una banda de verdad, de las que ya casi no quedan, gracias por decidir lanzar al mundo vuestras canciones, por hacernos partícipes de vuestras victorias, porque, aunque no os lo creáis, sois ganadores. Gracias por llenarnos la vida de bandas sonoras. Gracias por ir con los perdedores y enseñarnos a perder de forma sublime.
